TABAQUISMO-DEJAR DE FUMAR LÁSER.
Ansiedad y consumo de tabaco en niños y adolescentes.
En lo que atañe a los trastornos de ansiedad, distintos estudios muestran consistentemente una clara relación entre su prevalencia y el consumo de tabaco. Una nueva línea de investigación está surgiendo para conocer si el consumo de tabaco previo puede incrementar los trastornos de ansiedad o si, por el contrario, padecer un trastorno de ansiedad lleva a incrementar el consumo de tabaco o a comenzar a fumar.
Estudios como el de Johnson (200) han encontrado que, quienes a los 16 años fumaban un paquete o más de cigarrillos diariamente, seis años más tarde presentaban un mayor porcentaje de trastornos de ansiedad, respecto a los que a los 16 años sólo fumaban de 1 a 19 cigarrillos diarios. Aunque otros estudios no han replicado este tipo de relación (Patton 19), los ataques de pánico aparecen cada vez más consistentemente relacionados con fumar, facilitando la conducta de fumar la posterior aparición de ataques de pánico. (Breslau y Klein, 1999).